CUBA REMINISCENTE

Cuba es el cenotafio de los cubanos dignos, que un día desaparecieron para no sucumbir en las manos asesinas de la dictadura castrista. No acabamos de reencontrarnos con la certidumbre, acusamos un agotamiento estéril tratando de alcanzar la verdad censurada y maniatada, esa verdad que bien pudiera repararnos la moral para seguir adelante, el orgullo no puede seguir siendo el robo en defensa propia, las peticiones epistolares y telefónicas de pacotilla o enceres para el cambalache cotidiano.

La reminiscencia  del maldito 1/1/1959 el día del nacimiento fraudulento y culpable de la pantomima revolucionaria que nos fue ofertada y vendida como la panacea verde olivo, el idilio terrenal de un sistema donde todos supuestamente estaban incluidos, nos está quitando las fuerzas para continuar con la lucha por nuestra libertad, hoy las nuevas generaciones de cubanos olvidando el martirologio y el sacrificio humano pasado por los cubanos dignos, tratan de buscar como salida a sus males la convivencia con el propio mal, el compartir espacio en pasividad con la cúpula dictatorial, olvidando que ese sistema autodestructivo los devoro y los continua devorando en vida y posteriormente los expulsa por el recto de las ideologías en forma de mierda ciudadana, ilustrada y escolarizada en el conformismo crónico.

Cuba es un gran campo de Sí, donde todos asienten sumisamente con la cabeza a cualquier imposición por absurda y atropellante que esta parezca, aquello es un territorio vedado al No, porque cualquier disentimiento es castigado de manera brutal, el desarraigo y la destrucción sedimentan en los inútiles defensores de la unanimidad dictatorial algo que para ellos es positivo pero que a la vez resulta horrendo para todos nosotros. La pobreza cansa y acaba siendo una coartada política por lo que cada día nos ayudara menos gente, porque la hipocresía que en Cuba se ve como una panacea y un modo útil de vida en el mundo libre resulta repudiable y reprochable.

A todos los cubanos nos corresponde un poco de vergüenza y de culpa, si hoy todavía Estados Unidos no eliminan la Ley de ajuste y no quita el embargo, no es por como nosotros le hemos correspondido, no creo que sea porque nosotros como pueblo avasallado no les hemos dado sobrados motivos, nuestras actitudes mezquinas producen vergüenza ajena, nos creemos que cualquier cuento cuela, seguimos reincidiendo en la mentira, seguimos practicando de forma desmedida la doble moral y aun así muchos se sienten con suficiente moral para exigir al mundo que se nos tenga más en cuenta.

La dictadura nos postergo, nos censuro, nos desterró, nos prohibió y nosotros nos dejamos mansamente y esto no para, porque ahora pretende convertir nuestro exilio en un lugar invivible, nuestra isla dejo de ser patria cuando todos dejamos al unisonó de protestar y el exilio dejara de serlo, cuando sus calles terminen inundadas de toda la mierda que constantemente expulsa la dictadura por sus alcantarillas sociales en forma de intercambio.