VIRGENCITA DE LA CARIDAD

Cuando pienso en mi morena 
que se llama Caridad 
rezo como alma buena 
por toda una eternidad. 

Virgencita tú eres buena 
hazme un milagro de amor 
mira que muero de pena 
si tú no mitigas a mi cruel dolor. 
(Fragmento de la canción "Veneración". Rafael Cueto y Noemí Matos Cueto)

Mañana 8 de septiembre se conmemoran oficialmente los 400 años de tu aparición en nuestra isla por la bahía de Nipe, si, ya intuyo que estas pensando Cachita, que ahora esta mas destruida, que hoy está más sucia, que en la actualidad la gente se viste con peores harapos que entonces, pero como tú y yo, y todos los cubanos. Sabemos la causa de toda esta destrucción que han conllevado 53 años con la isla secuestrada incluido todos sus habitantes , si Virgen y aunque te parezca mentira, como en aquel lejano día de tu aparición en la bahía de Nipe continuamos esclavizados, esta vez no son los conquistadores españoles, esta vez nos ha esclavizado un delincuente nativo con descendencia gallega y su hermano (hoy en el poder) que tiene pintas de mandarín y a fin de cuentas nunca se supo muy bien ni quien era su padre, por lo que la madre tuvo que anotárselo al gallego Castro, ya tu sabes Cachita, cosas de las calenturas tropicales nocturnas.

Virgen del Cobre sabemos que los medios de comunicación de ustedes los Santos y Vírgenes son mucho más efectivos que los de nosotros los mortales, ya que les permiten estar en todos los sitios y escuchar todas las plegarias a la misma vez y Santísima lo más importante de todo, ¡coño! No tener que pagar las abusivas tarifas de ETECSA, ni correr el riesgo de ser espiados.

Santísima Caridad del Cobre en este 400 aniversario te lanzo mi particular lista de ruegos, desde este humilde y poco transitado Blog, que espero le lleguen y sean escuchadas desde este mismo momento.

Santísima Caridad del Cobre:

Concédale la libertad a Carromero.

Devuélvale la memoria al sueco.

Permítale al difunto Payá y a la difunta Laura, aunque sea a través de una sesión de Ouija o Santería, llamarle asesino a su verdugo Raúl y que retumbe la voz en toda la isla.

Concédale libertad, luz y paz a los verdaderos disidentes, si virgencita solo a esos que permanecen encerrados y abusados en sus derechos como por ejemplo Sonia Garro Alfonso, y su esposo Ramón Alejandro Muñoz González. Por solo ponerle dos buenos ejemplos y no hacer una lista medianamente larga, no se desgaste usted mi Santa con los dialogueros, fingidores y vividores a esos concédale un avión o una balsa y que se busquen la vida, que todo lo que aparentan hacer es con total hipocresía y doble moral, a esos oportunistas solo ayúdelos para que se desaparezcan de la isla de una vez por todas que esas siempre han sido sus verdaderas y únicas intenciones.

Ayuda al verdadero exilio cubano, al inamovible, a ese que los oportunistas le llaman recalcitrante, a encontrar la fórmula o el camino de la libertad y la paz para Cuba.

Quitenos o recrudezca la ley de ajuste cubano para cerrar la válvula de escape dictatorial.

Ayuda a los cubanos de intramuros a encontrar o cultivar (no a robar) los frijoles (ya sean negros, bayos o colorados) ayúdales también con el arroz, la yuca. Si Santa Virgen se lo que pudieras estar pensando, porque en aquellos remotos tiempos en que te apareciste había también tasajo, pero no Virgencita, ahora no se desgaste con esas pretensiones porque en estos tiempos la carne allí solo es para los mayimbes y los turistas y si tensa usted un poco la cuerda ha de saber que la pueden meter a la Santa cárcel por hurto y sacrificio de ganado mayor, un montón de años.

Santa Virgen expulse de la isla al “Cardenal de Aluminio” que tanto daño nos está haciendo a los cubanos con su reprochable alianza dictatorial y envíelo de párroco al barrio de Chueca en Madrid para que termine allí el resto de sus días en un retiro anal.

Santísima Caridad del Cobre una última pero no por ello deja de ser la más importante petición, llévese de una vez por todas mi Santa, a los asesinos de Biran, Fidel y Raúl, y a todos sus adláteres contemporáneos, si ya lo sé mi Santa, menuda carga, si quiere usted no los acojas en su seno para que no manche su capa de sangre, envíelos allí, a aquel lodazal donde están el asesino argentino Ché y todos los de su estirpe que se hayan ido antes.

Escucha mis plegarias Santísima Virgen devuélvenos la libertad al pueblo de Cuba por obra divina en tu 400 aniversario, óyenos esta vez que ya estamos desesperados y sin fuerzas, usted es testigo del desgaste que provocan 53 años de torturas y sufrimientos.

Amén.